Cuando se junta mucha gente, lo complicado no es llenar la casa… ¡es ponerlos a todos de acuerdo para jugar a algo divertido! Por suerte, hay juegos de mesa pensados especialmente para grupos grandes, con partidas rápidas, reglas sencillas y muchas carcajadas garantizadas.
Tanto si tienes una cena con amigos, una quedada familiar o una fiesta improvisada, estos juegos te sacan del apuro y encima convierten la noche en algo memorable. Aquí tienes nuestra selección definitiva de los mejores juegos para grupos grandes, perfectos para romper el hielo y echarse unas risas.
1. Exploding Kittens
Jugadores: 2–5 (hasta 9 con expansiones)
Un juego de cartas de ritmo rápido, humor absurdo y mucha tensión. El objetivo: evitar la carta de “gato explosivo” y sobrevivir más que tus amigos. Puedes desactivarla, pasarla a otro, o rezar que no te toque. Las cartas están ilustradas por The Oatmeal, lo que añade un extra de originalidad y locura. Perfecto para grupos por su dinámica simple, partidas muy cortas (10-15 minutos), posibilidad de revancha inmediata y factor sorpresa constante que engancha desde la primera ronda.
Algunas de las expansiones de exploding kittens:
2. Hombres Lobo
Jugadores: 8–18
Un clásico entre los juegos de roles ocultos. Cada noche los lobos matan a un aldeano y durante el día todos discuten para descubrir quiénes son los asesinos. Lo interesante es que nadie sabe en quién confiar, y cada partida es una historia distinta. Ideal para grandes grupos, drama garantizado y mucho faroleo. Se juega sin tablero, con mucha interacción verbal, lo que lo hace perfecto para fiestas o reuniones donde todos quieren participar a la vez.
3. Hitster
Jugadores: 2–10
El juego para melómanos. Cada jugador escucha canciones y debe colocarlas en orden cronológico en su línea del tiempo musical. Se juega con una app que lanza las canciones, y el reto es adivinar si salieron antes o después que las que ya tienes en tu línea. Fácil de jugar, divertido para adivinar, cantar y debatir. Ideal para fiestas donde la música no puede faltar, y muy accesible incluso para quienes no son expertos en juegos.
4. Typical Spanish
Jugadores: 4–8
Un juego 100% patrio en el que tendrás que adivinar tópicos, costumbres y cosas típicas de la cultura española. Desde “cosas que haces cuando tu madre te llama por tu nombre completo” hasta “frases de abuela”. Requiere rapidez, algo de cultura popular y muchas ganas de reírse. Las partidas son dinámicas, con categorías muy locas y situaciones en las que todos se sienten identificados. Risas aseguradas y perfecto para romper el hielo con cualquier grupo.
5. Guatafac
Jugadores: 3–10
Cada jugador tiene solo 8 segundos para responder a preguntas absurdas, atrevidas o surrealistas. ¿Qué harías si fueras invisible por un día? ¿Una canción para un funeral alegre? Las preguntas no tienen filtro y las respuestas pueden ser tan disparatadas como geniales. El juego ideal para grupos grandes con ganas de cachondeo, donde lo importante no es ganar, sino pasarlo bien sin parar de reír.
6. El Tonto del Pueblo
Jugadores: 4–10
Un juego donde los jugadores se enfrentan a retos tontos, ridículos o simplemente incómodos. ¿El objetivo? Reírse del “tonto” de la ronda. Lo divertido es que cada turno hay uno distinto, y las situaciones pueden ser tan absurdas como memorables: desde hacer sonidos de animales hasta inventarse teorías disparatadas. Cero presión, máxima diversión, perfecto para fiestas sin miedo al ridículo.
7. Virus
Jugadores: 2–6
El superventas español que engancha a cualquiera. Tienes que formar un cuerpo sano mientras infectas, vacunas o robas órganos a tus amigos. Las cartas son coloridas, con ilustraciones graciosas, y las reglas se aprenden en 2 minutos. Las partidas son cortas, muy dinámicas y adictivas. Es ideal para jugar varias seguidas sin que se repitan, con mucho pique sano y risas aseguradas.
8. Tranvía Mortal
Jugadores: 3–13
Un juego de humor negro donde tomas el papel del conductor de un tranvía que debe decidir a qué vía tirar… y quién vive o muere. Los jugadores colocan personajes en cada vía (algunos adorables, otros detestables) y tratan de convencerte de salvar a los suyos. Una mezcla de risa, drama, discusiones éticas y creatividad. Ideal para grupos con sentido del humor retorcido y ganas de improvisar historias surrealistas.
9. Party Shock
Jugadores: 4–16
Un clásico renovado: pruebas rápidas, retos físicos, preguntas locas y mucha improvisación. Incluye diferentes categorías que hacen que todo el mundo pueda brillar: desde el más payaso hasta el más listo. Todo el mundo participa, no hay tiempos muertos y las partidas son muy ágiles. Ideal para animar cualquier fiesta o reunión numerosa con variedad de tipos de jugador.
10. Mente Vacuna
Jugadores: 4–20
Piensa lo que pensaría la mayoría, no lo correcto. Esa es la premisa de este juego. Se plantea una pregunta (por ejemplo: “Una ciudad europea”) y tú ganas si coincides con lo que responden los demás. Parece fácil… hasta que te das cuenta de que todos piensan diferente. Risas garantizadas al ver cómo todos intentan pensar “como una vaca”. Perfecto para grandes grupos donde todos tienen voz.
11. Amigos de Mierda
Jugadores: 4–8
Un juego con preguntas incómodas, dilemas morales y situaciones límite. ¿Hasta dónde llegarías por un amigo? ¿Qué harías si te traicionan? Cada respuesta revela algo sobre ti y genera conversaciones inesperadas. Las risas vienen por la honestidad (o la hipocresía) del grupo. Recomendado para amigos de confianza y con humor negro. Un poco más adulto, ideal para cerrar la noche con algo más picante.
12. Throw Throw Burrito
Jugadores: 2–6 (mejor con 4+)
Juego de cartas + batalla de burritos blanditos. Así de simple. Cuando se activa una guerra de burritos, hay que esquivar y lanzar al estilo dodgeball. Entre ronda y ronda, construyes tríos de cartas y preparas tu defensa. Es físico, rápido, absurdo y un éxito rotundo con grupos que no paran quietos. La mezcla de estrategia ligera y acción lo convierte en un espectáculo cada vez que se juega.
Con estos juegos no hay plan aburrido
Ya sea con amigos de toda la vida o con gente nueva, estos juegos son ideales para romper el hielo, reírse a carcajadas y crear recuerdos que se comentan durante semanas. Lo mejor es que casi todos tienen partidas rápidas, se explican en minutos y permiten que se una gente a mitad de la noche.
Así que ya sabes: elige uno (o varios), abre una bolsa de patatas y prepárate para una quedada que lo va a petar.
